Los tres bandhas: la clave del control energético en el yoga

Los tres bandhas: la clave del control energético en el yoga

En la práctica del yoga, los bandhas son cierres o bloqueos energéticos que permiten dirigir el flujo del prana (energía vital) dentro del cuerpo. Activarlos no solo potencia la estabilidad física y mental, sino que también ayuda a conectar con una práctica más profunda, consciente y ligera.

Los tres bandhas principales son:

  1. Mula bandha (cierre raíz): activación del suelo pélvico
  2. Uddiyana bandha (cierre abdominal): elevación del diafragma y activación del núcleo
  3. Jalandhara bandha (cierre de la garganta): regulación del flujo energético en la parte superior del cuerpo

Cuando estos tres bandhas se activan juntos, se genera el maha bandha, conocido como el "gran cierre", que redirige la energía a los centros superiores y equilibra el sistema nervioso y energético.

Cómo se activan los bandhas

Mula bandha (cierre raíz)
Mula bandha se activa con una ligera contracción del suelo pélvico, similar a la acción de contener la orina. Se puede practicar sentado o de pie, enfocándose en la elevación de los músculos perineales. Su activación estabiliza el núcleo y dirige la energía desde la base del cuerpo hacia arriba.

Uddiyana bandha (cierre abdominal)
Uddiyana bandha se activa después de exhalar completamente, contrayendo el abdomen hacia adentro y hacia arriba, como si se vaciara la cavidad abdominal. Es una técnica que se debe practicar con el estómago vacío y en estado de apnea respiratoria. Este cierre activa el sistema digestivo, masajea los órganos internos y estimula el plexo solar.

Jalandhara bandha (cierre de la garganta)
Jalandhara bandha se realiza inclinando la barbilla hacia el pecho mientras se retiene la respiración con los pulmones llenos, cerrando el flujo de aire en la garganta. Se usa comúnmente en prácticas de pranayama, protegiendo el corazón y el cerebro de una presión excesiva y regulando el flujo energético.

Aplicación de los bandhas en la práctica de yoga

Los bandhas pueden integrarse en la práctica de asanas para aumentar la estabilidad y la conciencia corporal.

  • Mula bandha se activa en posturas de pie y equilibrio, como vrksasana (postura del árbol) o virabhadrasana II (guerrero II), para generar estabilidad y control interno.
  • Uddiyana bandha es clave en posturas de fuerza y equilibrio, como bakasana (postura del cuervo) o navasana (postura del barco), ya que proporciona una sensación de ligereza y control en el núcleo.
  • Jalandhara bandha se usa en posturas de inversión como sarvangasana (postura sobre los hombros) o en técnicas de pranayama como nadi shodhana (respiración alternada) para equilibrar el flujo de energía en la parte superior del cuerpo.

Beneficios de la activación de los bandhas

  • Fortalecen el núcleo y mejoran la estabilidad postural
  • Potencian la ligereza en posturas de equilibrio y fuerza
  • Mejoran la circulación energética y la conexión con la respiración
  • Ayudan a la concentración y a la claridad mental
  • Apoyan el proceso de desintoxicación del cuerpo y el sistema digestivo

Precauciones y contraindicaciones

El uso de los bandhas debe practicarse con consciencia y progresión. Se recomienda evitar uddiyana bandha y jalandhara bandha en casos de hipertensión, problemas cardíacos o durante el embarazo. También es importante no forzar la retención de la respiración y practicar siempre bajo la guía de un instructor experimentado.

La práctica de los bandhas permite acceder a un nivel más profundo de control físico y energético en el yoga. Con su activación consciente, la práctica se transforma en una herramienta poderosa para dirigir la energía y mejorar la conexión entre cuerpo y mente.

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